“Hace más de una década que decidimos eliminar las fricciones en los viajes de trabajo”, afirma Avi Meir, CEO y cofundador de Perk. “Con el tiempo, nos hemos dado cuenta de que esas mismas fricciones, pequeñas tareas frustrantes que la gente hace fuera de su trabajo principal, no solo estaban en los viajes, sino en todas partes. Para resolver realmente el problema, primero teníamos que entender su magnitud, y las cifras del estudio me sorprendieron incluso a mí. ¿Cómo puede una empresa de 1.000 empleados permitirse perder unas 7.000 horas a la semana en trabajo oculto? Perk ofrece a las empresas el impulso que necesitan para devolver el tiempo a las personas”.